España: La Cooperativa Textil más veteranas de Palencia en crisis

La crisis que desde hace años viene padeciendo el sector textil por la fuerte competencia de los mercados asiáticos, unida a la recesión económica, que ha ralentizado el consumo de algunos artículos hasta mínimos históricos, han herido de muerte a una de las cooperativas textiles más veteranas de Palencia, que ha dado una oportunidad profesional a sus integrantes, convertidas en autonómas, al no poder hallar una ocupación por cuenta ajena.

46 mujeres, integrantes de la sociedad cooperativa que cose pedidos de lencería para la firma comercial Sadecor, abandona la actividad ante la falta de carga de trabajo, lo que provocará que las cooperativistas se queden en la calle desde el próximo mes. La mayoría de las mujeres ha ido abandonando en los últimos días el puesto al no tener ya actividad que desempeñar, mientras que las que aún quedan echarán definitivamente el cerrojo a las instalaciones que durante años han sido su sede laboral, coincidiendo con el final de este mes de mayo, según manifestaron ayer las distintas fuentes consultadas.

A la triste situación que supone el hecho de no poder continuar con la actividad que han venido desarrollando durante las dos últimas décadas, el futuro laboral de estas mujeres resulta aún más dramático, ya que no cuentan con la posibilidad de percibir las prestaciones por desempleo, al estar inscritas como trabajadoras por cuenta propia, lo que acentúa aún más la precariedad económica en que se han quedado después de meses de lucha por sacar a flote la cooperativa.

Un episodio más de lo que ha venido sucediendo con muchas de las cooperativas textiles que nacieron en la provincia de Palencia integradas por mujeres y que no han podido subsistir a la reconversión que se ha producido en el sector.

La situación de esta cooperativa que ahora cuelga el cartel de cierre resulta similar al triste desenlace que tuvieron hace dos años las siete sociedades ubicadas en Paredes de Nava, un municipio con una sólida tradición en el cooperativismo textil. Como en el caso de la que ahora se cierra en la capital, el descenso de la cartera de pedidos por parte de las empresas que suministraban la actividad acabó con el sueño de medio centenar de emprendedoras.

Fuente: http://www.nortecastilla.es